Una microreserva es una zona de menos de 20 hectáreas de extensión, que es declarada mediante Orden de la Consellería de Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana, a fin de favorecer la conservación de las especies botánicas raras, endémicas o amenazadas, o las unidades de vegetación que la contienen. En la microrreserva se encuentran protegidas las plantas y los sustratos sobre las que éstas crecen (suelo, roca, etc.). En la actualidad Benifato cuenta con tres Microreservas de flora declaradas: el Passet de la Rabosa, el Runar dels Teixos y la Penya de la Font Vella. Además se ha solicitado la declaración de una cuarta microreserva, el Runglador o Morro de les Moles.
La variada comunidad faunística de la sierra constituye una buena representación de los medios de montaña mediterránea. De hecho, por su superficie y la relativamente escasa presencia humana, Aitana ha representado un importante papel como refugio de especies que ha enrarecido extremadamente o que han desaparecido en otras sierras próximas.
En la vegetación forestal de la sierra se concentra una variada comunidad de mamíferos, entre los que se encuentran la gineta, el teixó, la fagina, el gat cerval o la rata cellard, el zorro, el jabalí, etc. En cuanto a la avifauna, son características de estos medios muchas especies de pequeños pájaros paseriformes, así como otros como el picot verd, la griva, el tudó, el gaig, etc. Mención aparte merece la rica población de rapaces, entre la que se pueden encontrar el halcón real, el águila de panza blanca, el águila daurada, el brúfol, el xoriguer, l´aligot, l´esparver, l´astor, el garamús o el muslo banyut. La cumbre más alta de la provincia es también un importante lugar de paso para las aves en sus pasos migratorios, siguiendo el valle de Guadalest. Las aves de montaña en Aitana gustan de espacios abiertos y suelen viajar en bandos, siendo también mucho más conspicuas debido a la falta de cobertura vegetal propia de esas alturas.
La flora es el aspecto más destacado de la población biótica de la Sierra de Aitana. Se pueden encontrar muchas especies frecuentes al norte del país, pero escasas en esta zona, otras propias de sierras béticas situadas más al sur, algunas de las cuales establecen en Aitana su límite norte de distribución, y especies endémicas de gran valor biogeográfico. La sierra conserva enclaves forestales destacables, representados por bosques más o menos extensos de carrasca, enriquecidos en las zonas más frescas y húmedas con especies como el freixe de flor, l´auró, la moixera e incluso el galler y el teix. Así, la formación arbórea más extensa en la sierra es el pinar, favorecido por las repoblaciones efectuadas. Els espinals y les bardisses, de un elevado interés biogeográfico, representan un importante papel en la vegetación de la sierra, sobre todo en los niveles superiores de la vertiente norte. La cobertura vegetal de las partes más altas de Aitana está compuesta en su mayor parte por matorral bajo y resistente a los bruscos cambios de temperaturas, que llegan a alcanzar el bajo cero en invierno, quedando en muchos casos bajo la nieve, y más de 40º C en verano. Destacan el cojín de monja, el rosal silvestre o escaramujo, el espino blanco, todas ellas caracterizadas por las espinas o las hojas en formas espinosas que les permiten retener el agua al máximo.
La gran variedad vegetal y faunística de la Sierra de Aitana le otorga un valor añadido que la configura como una de las sierras más importantes de la provincia de Alicante. A pesar de no estar catalogada como Parque Natural y de contar tan sólo con la calificación de monte público y, junto con la Sierra de Serrella y del Puig Campana, de Lugar de Interés Comunitario, los valores medioambientales y la conservación de muchos elementos que componían la organización tradicional del espacio la hacen merecedora de la protección con esta figura. Otro aspecto que apoya la necesidad de catalogarla como Parque Natural es la existencia de varias microrreservas de flora incluidas en el Proyecto LIFE de la Unión Europea, lo que conlleva la protección y conservación de estos espacios y la realización de tareas de difusión de los valores de la Sierra de Aitana.